Introducción a la Temática de Sistemas, Mundo y Temas Afines

Indice

  1. Introducción
  2. Enfoque general
  3. Mundo
  4. Mundo Mejor
  5. La mirada desde lo sistémico
  6. La noción del sistema en Economía
  7. Concepción “sistémica” y su relación entre el “todo o sistema” y “la salud”
  8. La cuestión del Equilibrio, el Desequilibrio y el Caos
  9. Para el marxismo
  10. Teoría General de los Sistemas
  11. Karl Polanyi: “formas de integración” equivalentes a “sistemas”
  12. Georgescu-Roegen y el enfoque bioeconómico
  13. El rol del cambio tecnológico
  14. Otros conceptos
  15. A modo de conclusión provisoria

Este es un primer documento introductorio tratando de definir algunos conceptos generales sobre la temática que se busca encarar, en particular para quienes estén interesados en la dimensión económica.

 Introducción

  • En la búsqueda de una verdad siempre incompleta, que se nos va develando  en su complejidad bajo múltiples aristas, y diferenciándola de lo que recientemente se ha definido como “post verdad” (que según el Diccionario de Oxford refiere a circunstancias en las que los hechos objetivos tienen menor peso que los discursos emotivos o creencias personales).

Enfoque General

  • En el marco de lo anterior vamos a tratar de abordar esta temática, en distintas presentaciones y notas, trataremos de ir a un proceso de desambiguación (término que se utiliza mucho en la Wikipedia),  que consiste en “el proceso de identificar con qué sentido una palabra está usada en los términos de una oración, cuando la palabra en cuestión tiene polisemia, es decir, pluralidad de significados”.
  • Por otro lado “la complejidad” que tiene todo fenómeno y con un enfoque lo más didáctico posible.
  • Una de las personas que más ha trabajado el concepto de complejidad es Edgar Morin, ligándolo al concepto de “sistemas” y que “se presenta con trazos inquietantes de confusión, desorientación, desorden, ambigüedad, incertidumbre, y de ahí la necesidad para poder hacer un mejor manejo del conocimiento”.

 Mundo

  • Se utiliza el concepto de “mundo” como equivalente de “realidad global o planetaria” donde está inserto el ser humano, y aquí se lo trata de analizar desde una mirada sistémica. Por supuesto se lo puede desagregar en distintos «mundos o submundos»: el de las ideas, el mundo económico (y dentro del mismo el mundo financiero, el mundo productivo…), social, político, cultural… Además hay distintos enfoques filosóficos y teológicos (en especial del pensamiento cristiano) referido al concepto de “mundo”, que no abordaremos aquí (para quien esté interesado puede ver textos como este).
  • Cuando analicemos la cuestión del cambio tecnológico o innovaciones abordaremos una frase que se utiliza frecuentemente en este ámbito respecto de “cambiar el mundo”

Mundo Mejor

  • Aquí se plantea la posibilidad de transformar la “realidad” o el “mundo” en un sentido de “mejor”
  • Mejor entendido como vida más plenamente humana, mayor felicidad, mayor armonía, justicia, desarrollo integral, libertad, fraternidad, amistad….
  • Lo anterior conlleva que predomine el amor y no el odio, que podamos articular virtuosamente lo individual o personal (según el enfoque) con lo común, la madurez de poder “descentrarnos” y tratar de poder ponernos en el lugar de la “otra persona” y de lo “bueno” no sólo para mi sino también para el conjunto (entendido también como medio ambiente)

La mirada desde lo sistémico

  • Qué entendemos por sistema? Su origen etimológico derivado del griego y latín: conjunto de cosas o elementos (pueden ser principios o ideas, etc.) que relacionados entre sí, ordenadamente contribuyen a determinado objeto o fin.
  • Con distintas acepciones…Lo usamos para cuestiones muy diversas:
  • “Se cayó el sistema” …informático;
  • El sistema democráticoy a su representación política: v.g. por estar “alejada del pueblo o de la gente” («establishment» institucional») o por su vinculación con el “establishment  económico», y los políticos «antisistema». También, en algunos casos (como en el debate por la elección presidencial de Argentina en 2019) algunos referentes la utilizan para plantear que el conflicto principal se plantea entre sistema democrático vs autocracia, entre dos variedades capitalismo como el «progresista» vs «el de amigos» (o «modelo chavista»), etc.
  • La globalización o el “sistema-mundo” (desde la izquierda hasta planteos como el de D. Trump)
  • El “sistema económico hegemónico”: el capitalismo con sus distintas “variedades” (en particular desde el liberal hasta el capitalismo de estado). Para el enfoque de «variedades» (en particular de capitalismo) véanse aportes como el de Hall, P. y Soskice, D. (2001), Varieties of Capitalism, The Institutional Foundations of Comparative Advantage, Oxford University Press. También pueden verse las publicaciones como las de David Coates, de Bruno Amable (véase, en particular: “Les cinq capitalismes: diversité des systèmes économiques et sociaux dans la mondialisation”, Univ. de Paris 1, 2005), Barry Clark (en especial “The Evolution of Economic Systems: Varieties of Capitalism in the Global Economy”, Oxford University Press, 2016), entre las principales.
  • El sistema económico donde predomina una variedad de capitalismo, pero hay una economía plural que incluye economía social (y otras como la economía del bien común, la economía de comunión, la economía ecológica, las ecovillas, etc.) una y economía pública.
  • El «sistema como algoritmo«, ya sea en lo macro como en lo micro en inteligencia artificial o en lo biológico. En esta dirección va Harari con su libro «Homo Deus» y un sistema (¿el del siglo XXI?) con economías de plataformas, si sobrevivimos al cambio climático.
  • El sistema como ”orden” (u organización social o socioeconómica) actual porque es injusto, porque predomina el no cumplimiento de las reglas (corrupción), porque las reglas no son justas o adecuadas….entre otras. Políticos o actores sociales “anti-sistema” con diversos enfoques, cuando lo cuestionan.

La noción de sistema en Economía

  • Surge en el Siglo XIX como “reacción” a la economía clásica (en particular a Adam Smith y David Ricardo)
  • Los Clásicos como Smith se van a focalizar en lo que quieren “combatir”, es decir el “sistema mercantil” pero no van a profundizar mucho la noción del “sistema” (hay UNA SOLA economía que garantiza la riqueza de las naciones)
  • SOMBART sí habla de SISTEMA y enuncia como principales características:
  1. Espíritu de un sistema: (recordar la obra de Max Weber “El espíritu del Capitalismo”) Está constituido por ideas, creencias y móviles dominantes de la actividad económica. En general se traducen a los valores admitidos en la sociedad (normas introyectadas e “ideales”) que motivan los comportamientos económicos.
  2. La forma: es el molde en el cual el espíritu puede manifestarse, a través del conjunto de elementos jurídicos sociales que definen el cuadro de la actividad económica y y la relación entre sujetos económicos.
  3. Su Técnica o Substancia que consiste en el conjunto de instrumentos y procedimientos materiales por los cuales se obtienen y transforman los bienes (es decir, la tecnología). Sobre la base de estos elementos Sombart entiende que han habido 5 sistemas:
  • La economía de auto-subsistencia.
  • La economía artesanal.
  • La economía capitalista.
  • La economía colectivista.
  • La economía corporativa o corporativista (sería el caso del fascismo y el nazismo, en una variante extrema)

Lajugie (tributario de la Escuela Historicista Alemana), lo define como:

  • Un conjunto coherente de instituciones jurídicas y sociales en el seno de las cuales son puestos en práctica, para asegurar la realización del equilibrio económico, ciertos medios técnicos, organizados en función de ciertos móviles dominantes.
  • El régimen económico no es más que un elemento del sistema, y se define como el conjunto de reglas legales que, en el seno de un sistema dado, rigen las actividades económicas de los hombres, es decir sus hechos y acciones en materia de producción y cambio.

Las reglas pueden tener un doble objetivo

  • Las relaciones de los hombres con los bienes: el régimen de los bienes plantea el problema de la propiedad.
  • Las relaciones de los hombres entre sí: el régimen de las personas plantea el problema de la libertad económica.

Para más detalle sobre este autor veáse Lajugie, J., (1997, y varias ediciones) “Los Sistemas Económicos”, EUDEBA, Buenos Aires.

Podemos también decir que…

  • Al “régimen económico” también se lo define como “ORDEN jurídico” o más generalmente “ORDEN”.
  • El “des-orden” se produce cuando el “orden jurídico” no coincide con determinadas prácticas sociales, formas sociales o culturas determinadas. Un ejemplo de esto sería el caso de las mafias o el narcotráfico.

 ¿Qué pasa cuando hay “desorden”?

  • El “sistema” se desequilibra, se “caotiza”, lo informal y lo ilegal comienzan a crecer
  • Si hacemos un paralelismo con el cuerpo humano como “sistema”, cuando se sale del “equilibrio” o “armonía” emerge la “enfermedad”, lo “no saludable”, lo “patológico”…

 Concepción “sistémica” y su relación entre el “todo o sistema” y “la salud”

  • En la Conferencia de Alma-Ata, en 1978 de la OMS, se define “salud” como un estado de COMPLETO BIENESTAR FÍSICO, MENTAL Y SOCIAL, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades… cuya realización exige la intervención de muchos otros actores sociales y económicos además del de la salud (subyace la concepción de sistema para la ciencia de la salud).

 El “sistema ¿puede dañar o matar”?

  • Los móviles, procesos y resultados de un sistema pueden “excluir”, hacer “inclusiones no satisfactorias”, y cuando se producen “malformaciones” (como la mafia o el narcotráfico) y en consecuencia todo esto “es poco saludable”, daña o mata.

La cuestión del Equilibrio, el Desequilibrio y el Caos

  • En otra presentación trataremos de hacer mención a estos importantes aspectos, a los cuales se han referido científicos tan diversos como Newton, Smith, Walras, Nash, Prigogine….

 PARA EL MARXISMO

  • Marx no utiliza la palabra “sistema”. Los autores que analizan la obra de Marx, Nietzsche y Kierkegaard señalan que los tres se enfrentaron con “EL SISTEMA” entendiendo por esta palabra la cosmovisión y enfoque “hegeliano
  • Utiliza el término “Modo de Producción”, modo de obtener los bienes materiales necesarios al hombre para el consumo productivo y personal.
  • En la Contribución a la Crítica de la Economía Política plantea que: “El conjunto de las relaciones de producción constituye la estructura económica de la sociedad, la base real sobre la cual se eleva una super-estructura jurídica y política, y a la que corresponden formas sociales determinadas de conciencia”

 MODO DE PRODUCCIÓN

  • Unidad de las Fuerzas Productivas: conjunto de los medios de producción – base material y técnica- y de los hombres – los trabajadores- que los emplean para producir bienes materiales y
  • de las Relaciones Sociales de Producción: conjunto de relaciones económicas que se establecen entre los hombres independiente-mente de su conciencia y voluntad, en el proceso de producción, cambio y distribución de los bienes materiales.

 BASE Y RELACIONES

  • En la base de las relaciones de producción se encuentra en las relaciones de propiedad sobre los medios de producción.
  • El carácter de las relaciones de producción depende de quienes sean los dueños de los medios de producción.

 CUATRO MODOS DE PRODUCCIÓN

  • Esclavista.
  • Feudal (con su variante asiática).
  • Capitalista.
  • Socialista.

Una configuración multilineal y más compleja se puede consultar en la página 42, del texto Umberto Melotti, (1972),  “Marx y el Tercer Mundo”, de Amorrortu Editores, Buenos Aires y visualizar en la siguiente imagen:

Más recientemente un economista alemán Walter Eucken (1891-1950) los clasifica de la siguiente manera:

[vc_row][vc_column width=’1/3′]Modo de Funcionamiento[/vc_column][vc_column width=’1/3′]Propiedad Privada[/vc_column][vc_column width=’1/3′]Propiedad Colectiva[/vc_column][/vc_row]

[vc_row][vc_column width=’1/3′]Mercado[/vc_column][vc_column width=’1/3′]Capitalismo Clásico[/vc_column][vc_column width=’1/3′]Socialismo de Mercado[/vc_column][/vc_row]

[vc_row][vc_column width=’1/3′]Plan (Imperativo, no indicativo o estratégico)[/vc_column][vc_column width=’1/3′]Economía Capitalista de Guerra[/vc_column][vc_column width=’1/3′]Socialismo Centralizado[/vc_column][/vc_row]

La Teoría General de los Sistemas

  • Karl Ludwig von Bertalanffy (1901-1972) biólogo austríaco que luego de la Primera Guerra Mundial hizo sus primeros aportes a una Teoría General de los Sistemas. Su edición ampliada y corregida se publicó en 1969.
  • Presentó una teoría que intenta explicar todos los fenómenos científicos a través de la interacción entre las ciencias naturales y sociales desde los elementos más simples como los átomos y moléculas hasta los más complejos.
  • La Teoría General de los Sistemas (T.G.S.) propuesta, más que fundada por Bertalanffy, aparece como una meta teoría, una teoría de teorías, que partiendo del muy abstracto concepto de sistema busca reglas de valor general, aplicables a cualquier sistema y en cualquier nivel de la realidad.
  • En el marco de esta teoría en la siguiente imagen hay un aporte de Kenneth Boulding sobre “jerarquías de sistemas” que se ordenan en 9 niveles de acuerdo con su complejidad (desde “frameworkssystem” hasta “transcendental”). Para mayor detalle véanse fuentes como: https://www.panarchy.org/boulding/systems.1956.html

Karl Polanyi: “FORMAS DE INTEGRACIÓN” EQUIVALENTE A “SISTEMAS”

  • Este autor diferencia lo que es un enfoque «formal» de la economía, respecto de un enfoque «sustantivo», adoptando este último. Relacionado con él considera que un estudio relativo a la manera en que las economías empíricas son institucionalizadas debe en primer lugar ligarse a la manera en que la economía adquiere unidad y estabilidad, es decir a la interdependencia y a la recurrencia de sus elementos. Esta investigación se efectúa por medio de una combinación de un número limitado de modelos que se podrían denominar formas de integración.

 Las formas de INTEGRACIÓN están relacionadas con MODELOS

  • Como ellos se producen paralelamente a niveles diferentes y en sectores diferentes de la economía, es frecuentemente imposible considerar uno solo entre ellos como dominante, de modo que ellos permitan proceder a una clasificación general de las economías empíricas

 TRES MODELOS PRINCIPALES

  • Desde un punto de vista empírico constatamos que los principales modelos son la reciprocidad, la redistribución y el intercambio.
  • Retomaremos en otra presentación las características que han tomado y pueden tomar en la historia.
  • Para más detalle véanse textos como Polanyi, K. (1957), The Economy as an Instituted Process, en Trade and Market in the Early Empires. Economies in History Theory, The Free Press, New York.

Georgescu-Roegen y el enfoque bioeconómico

  • Los sistemas biológicos y económicos no son sistemas aislados, sino estrechamente interrelacionados. Una síntesis sobre su enfoque se puede encontrar en un texto de Oscar Carpintero: https://blogsostenible.wordpress.com/libros-gratis/libros-sobre-economia-politica-paz/libro-la-bioeconomia-de-georgescu-roegen-por-oscar-carpintero/

 El rol del cambio tecnológico

Otros “conceptos” o categorías “totalizadoras” similares

  • Cultura/s: desde “valores en común” hasta “todo el quehacer un humano de un grupo determinado”. Algunos “culturalistas” hablan de “sistemas culturales”.
  • De acuerdo con el estructuralismo de Lévi-Strauss (tesis que comparte con White), la cultura es básicamente un sistema de signos producidos por la actividad simbólica de la mente humana

 Una diferencia importante…

  • Entre “communitas” y “societas”, según Victor Turner (1920-1983,  antropólogo cultural) y tomado por Z. Bauman
  • Comunidad: Tener “en común” un pasado, un presente, un futuro, una identidad, intereses, valores, visiones, prácticas, proyectos…
  • Según Victor Turner, y mencionado por Z. Bauman, está caracterizada por homogeneidad, igualdad, ausencias de status, y anonimidad (asociado a lo pre-moderno). El uso de “comunidad” también refiere a la posibilidad de que un “padre” o una “madre” sean quienes lideren la misma, o a que “los hermanos se roten.. o una forma de “mayorazgo”…
  • Sociedad: Es un concepto que aparece en la “modernidad” (a diferencia del comunitarismo) y se expresa a través de la   heterogeneidad, inequidad, diferenciación de status, y nominatividad. El liderazgo en lo “moderno” está asociado, aunque no siempre (ej.Hitler), a formas “democráticas”

 Otros conceptos más complejos…

  • La idea o el enfoque “totalizador” de “sistema” tiene analogías con el concepto de “campo” (y su relación con las “partículas”) en la física cuántica,
  • Entre otros …. y aquí finalizamos esta breve presentación de algunas de las principales acepciones del tema

 A modo de conclusión provisoria….

La mirada desde lo sistémico y complejo del mundo no es sencilla y requiere de múltiples abordajes

Distintos enfoques, a partir de lo económico, priorizan la interrelación de:

  •  Móviles generados por necesidades, deseos y emociones, racionalidad/es, valores, ideologías, visiones o cosmovisiones, expresiones culturales…
  •  Procesos y formas desde espontáneos y coyunturales hasta estructurales y con diversas expresiones institucionales (y por lo tanto socio-políticas y vinculadas al poder) de relaciones entre las personas (entre sí, con los bienes y con una mediación tecnológica que se va acelerando, profundizando y en perspectiva autonomizándose) con distintos tipos de conflictividad y expresiones (de inclusión/exclusión, ser o tener, lo individual y lo común, etc.), reconfigurándose actividades humanas (como el trabajo y el ocio) en un contexto medioambiental evolutivo (de continuidades y rupturas, incluyendo la temática del cambio climático),
  • Expresándose lo anterior en resultados que se manifiestan de distintas maneras: equilibrio o desequilibrio, desarrollo (en particular en qué dirección se expresa la libertad, la cuestión de la equidad y la justicia, y más en general en qué tipos de vínculos).

Por lo tanto cualquier cuestión vinculada al “cambio” deberá tener en cuenta todos estos aspectos (en un contexto de “aceleración” y de creciente asimetría entre destrucción y creación/cuidado) y de articulación entre lo micro y lo macro, de pasaje de lo abstracto a lo concreto y de prueba y error revisando móviles, procesos y resultados. Será relevante el ser conscientes de que no hay «atajos» (por ejemplo la voluntad de unos contra otros como forma de poder ejerciendo una coerción violenta) dado que la historia enseña que, a la corta o a la larga, no tiene viabilidad de cambio profundo y sostenible en el tiempo.

¿Podremos darle un “sentido” al cambio, con un ritmo y una práctica democrática y sostenible en dirección a “un mundo mejor”? o nos extinguiremos y pereceremos porque no sabremos evolucionar con sabiduría?

PD: Existen otras notas vinculadas con el sistema y la moral, su formulación inicial, el sistema como «jaula de hierro«, la complejidad del tema, la posibilidad de evolucionar hacia un postcapitalismo….y la sección denominada «otras economías«.

Postcapitalismo

El nacimiento del capitalismo (1), más allá de su vigoroso desarrollo, fue acompañado de reacciones y críticas tanto desde enfoques vinculados a la pre-modernidad como también desde la modernidad. Dentro de esta última se puede mencionar desde dimensiones de la cultura (como es el caso de obras de Charles Dickens, en especial Oliver Twist), pasando por lo social como es el caso del sindicalismo, lo socio económico con expresiones como el “owenismo” y el nacimiento del cooperativismo y otras formas de economía social, hasta lo político como es el caso de la izquierda con el anarquismo y el socialismo (desde el denominado utópico al científico con el marxismo-leninismo), por citar los principales (a las que habría que agregar otras como desde el catolicismo con expresiones como la Encíclica Rerum Novarum).
También cabe destacar las fuerzas de la cultura que promovieron su desarrollo. Según el enfoque de Max Weber, en su obra «La Ética Protestante y el Espíritu del Capitalismo» tuvieron gran influencia, en un contexto donde la idea de progreso se articuló con el conocimiento de artesanos (en especial en Inglaterra y norte de Europa), el desarrollo del comercio que venía del mercantilismo y los cambios tecnológicos que se comenzaron a dar en forma significativa.
Haciendo un salto en el tiempo tenemos a Joseph Schumpeter que con su obra Capitalismo, socialismo y democracia (1942), planteó el problema de qué el capitalismo estaba amenazado por su éxito y no por sus limitaciones. Hoy la relación entre capitalismo y democracia tiene nuevos aportes.
Por su parte, Peter Drucker, considerado uno de los padres de la Administración, expresó su visión acerca de la sociedad que denominó postcapitalista (1993) luego de reseñar la particularidad de las distintas etapas de la humanidad. Al aludir a la creación de la «sociedad postcapitalista» mencionó en el proceso un giro hacia una «sociedad del saber«. Además de plantear las implicancias organizacionales y políticas, descartó hacer «una historia del futuro». En la obra de referencia desarrolló la perspectiva del saber “como el recurso» de la sociedad postcapitalista, la desaparición de la mano de obra como factor de producción y la redefinición y el papel del capital tradicional.
Sobre este enfoque consideramos que “el conocimiento como recurso” puede también considerarse una forma de capital, que los seres humanos adquirimos y desarrollamos como un haber vinculado en distinto grado y según modalidades diversas con el entorno familiar y social, la educación y el sistema científico-tecnológico.
También, desde esta perspectiva, Alvin Toffler en una obra escrita en 1990, señaló al conocimiento como un recurso de poder del futuro. Dicho recurso -de la más alta calidad-, puede ser ejercido de distintas maneras, algunas plenamente “compatibles” con el actual capitalismo y otras que se expresan como vehículo de una agresividad que adopta distintas formas como rivalidad, dominación o guerra.

Sobre esto último se mencionarán algunos ejemplos de una expresión de rivalidad en esta “sociedad del conocimiento”. En el primero de ellos nos basamos en la nota de Ernesto Martelli en el diario La Nación del 19/3/2017 donde dice, entre otras cosas: El diario británico The Guardian contabilizó esta semana 18 elementos copiados a Snapchat directamente por Facebook o a través de sus distintas empresas (el Status de WhatsApp o el Messenger Day entre las más recientes). De todos modos, la controversia excede la visión de negocios: mientras muchos señalan una crisis del departamento de investigación y desarrollo, otros precisan un empeño personal de Zuckerberg en imitar hasta destruir a su colega Spiegel, de 26 años. Aunque para eso sacrifique su perfil innovador. Recuerdan sus analistas la frase favorita de Zuckerberg para sus adversarios, tomada del Imperio Romano: Cartago debe ser destruida”. Se pueden dar otros ejemplos como la rivalidad entre Steve Jobs y Bill Gates, o los suicidios e intentos de suicidios entre 2009 y 2012 en plantas fabriles de Foxconn por la “presión laboral”.

Volviendo a la cuestión de “superar o trascender” al capitalismo encontramos enfoques vinculados al cambio climático (por ej. el libro de Naomi Klein, «Esto lo cambia todo. El Capitalismo contra el clima», Paidós Ibérica, 2015) y de este con su imbricación en las demás relaciones sociales y el impacto en la pobreza («Encíclica Laudato Si, Sobre el cuidado de la Casa Común», del Papa Francisco).

Sin embargo la mayor parte de la literatura reciente sobre esta temática va por el lado del impacto de los cambios científicos-tecnológicos, como lo menciona un artículo del 8/3/2016 de Justo Barranco en el periódico La Vanguardia. En esta nota menciona a cinco autores:

  • Paul Mason y su libro «Postcapitalismo. Hacia un nuevo futuro» (Ed. Paidós, Barcelona, 2016). Lo que sintetiza Barranco es que: «la crisis actual no sólo anuncia el fin del neoliberalismo sino que las nuevas tecnologías de la información no son compatibles ya con el capitalismo actual porque en condiciones de competitividad y mercado libre, el precio de algo que no cuesta nada de reproducir debería estar próximo a cero. Ya no es una utopía pensar en sustituir el capitalismo, dice, y ve formas básicas de una economía poscapitalista en el sistema actual, como el gran auge de la producción colaborativa»
  • Jeremy Rifkin y su libro «La Sociedad de Coste Marginal Cero: El Internet de las cosas, el Procomún Colaborativo y el eclipse del capitalismo» (Paidós, España, 2014). En la nota de La Vanguardia, sobre este texto se expresa entre otros conceptos que: «el capitalismo comenzará su ocaso en las próximas décadas y será en buena parte sustituido por otro paradigma: el procomún colaborativo. Una economía donde el capital social será mucho más importante que el financiero, compartir más importante que competir, los mercados perderán terreno ante las redes a las que se conectan miles de millones de personas y cosas y los consumidores se convertirán en fabricantes de su energía y bienes, en prosumidores….  El capitalismo será un complemento en las áreas en las que los costes marginales sigan siendo notables. La sociedad será menos materialista y la idea de que el valor de un ser humano se mida por su nivel de producción de bienes se verá primitiva».
  • Zygmunt Bauman, en su presentación en el documental «En el mismo barco«: En la síntesis periodística se expresa que «Hace 30 o 40 años en los países llamados desarrollados se prometía el empleo total. La palabra ‘desempleado’ subrayaba que eso estaba fuera de la norma. Hoy en los países anglosajones se utiliza la palabra redundant, redundante. Es un veredicto en el mercado laboral. Es gente inútil, un problema de ley y orden más que social”. No sólo se deslocalizan trabajos al Tercer Mundo. A eso se añade la computerización de todo. “Si no se ha extendido más es porque hay países pobres donde el trabajo es aún más barato. Cuando sea más caro, será completada. También la del trabajo intelectual. Así que estamos a punto de un mundo nuevo y la única posibilidad que nos queda en él es cortar la conexión entre empleo y medios de subsistencia. Que el ingreso de la sociedad se divida para que todos sean mantenidos con vida. La robotización del trabajo duro es una bendición. Pero hay que hacer algo con los actuales mecanismos de la sociedad para hacerla vivible”.
  • Erik Brynjolfsson y Andrew Mcafee, investigadores del MIT, y sus libros «La carrera contra la máquina»  (Antoni Bosch editor, 2013) y «La segunda era de las máquinas» (Hardcover, 2014) . En este último texto afirman que «está en la naturaleza de la economía digital, afirman, que los bienes y servicios se provean a la vez a un infinito número de compradores a un precio cercano a cero. Son optimistas porque creen que estamos al borde de una explosión de creación de riqueza por la revolución digital, pero saben que las ganancias van a ser para los consumidores y para los que crean y financian las máquinas. A los trabajadores se les deberán impartir las habilidades para trabajar no contra sino junto a las nuevas máquinas inteligentes».
  • Por último se cita a Tyler Cowen y su obra «Se acabó la clase media» (Antoni Bosch editor, 2014) donde señala el impacto del cambio tecnológico sobre esta clase y las brechas sociales cada vez mayores. También menciona que «los equipos hombre-máquina revolucionarán la economía, la medicina y la ciencia. Las empresas podrán evaluar el rendimiento económico de cada trabajador con precisión agobiante: habrá hipermeritocracia. Y un gran crecimiento del empleo en los servicios personales: criados, chóferes, jardineros. Y gente que ofrezca experiencias a los ricos, que serán entre el 10% y el 15% de la ciudadanía. Gran parte del resto tendrá salarios estancados o menguantes, aunque con más oportunidades de diversión y educación baratas».

Sin duda hay muchos otros enfoques como los planteados en los artículos de la publicación “Alternatives Economiques”, de Ludovic Desmedt et Odile Lakomski-Laguerre: “Du bitcoin au faircoin et au-delà”, otras similares o de Christian Arnsperger, “Revenu de base, économie soutenable et alternatives monétaires«. Este último autor ha escrito también el libro Étique de l´existence post-capitaliste. Pour un militantisme existentiel, CERF, Paris, 2009), donde –entre otras cosas- plantea sobre la importancia de orientarse en base a nuevos principios de vida, repensar profundamente la social-democracia e inaugurar una visión «comunalista» (tal vez podría traducirse como «comunitaria» ubicada localmente)  de la economía, crear nuevas «comunidades existenciales críticas», promoviendo una ética de la simplicidad voluntaria, de la redistribución radicalmente igualitaria y de la democratización profunda.

Entre los enfoques debemos incorporar el denominado «aceleracionismo» que según esta fuente «la teoría aceleracionista surgió en la década de 1990 y se ha dividido en variantes de izquierda y de derecha mutuamente contradictorias, existiendo aceleracionismos procapitalistas, poscapitalistas y anticapitalistas». En lo que se refiere a los postcapitalistas, la fuente mencionada expresa que «en el Manifiesto por una política aceleracionista, Alex Williams y Nick Srnicek consideran necesario revivir el argumento a favor de una sociedad poscapitalista: «No solo el capitalismo es un sistema injusto y pervertido, sino que también es un sistema que frena el progreso». En este sentido, ambos argumentan que «el aceleracionismo es la creencia básica de que estas capacidades pueden y deben ser liberadas al ir más allá de las limitaciones impuestas por la sociedad capitalista» Autores como Mark Fisher, aclaran que no se trata de acelerar cualquier proceso capitalista, sino que aquellos procesos y deseos producidos por el capitalismo, pero cuyos efectos no pueden ser contenidos por áquel y que podrían conducir a un mundo poscapitalista».

Vemos que hay coincidencias sobre el enorme impacto en el trabajo y en el vínculo entre humanos y tecnología, pero hay diferencias de opinión acerca de si el capitalismo cambiará de forma en un postcapitalismo que mantendrá su esencia (en la búsqueda del lucro y la propiedad) pero con una gran robotización (con algunos planteos negativos sobre los alcances de la inteligencia artificial), y otros en cambio plantean que predominará la economía colaborativa y una sociedad menos materialista, con lo que este postcapitalismo no tendrá la misma «substancia o esencia» que el capitalismo.

Nuestra perspectiva adhiere a esta última posición, a un cambio de cultura donde prevalezca la «cultura del cuidado» frente a lo que es una cultura de «relaciones de poder«. Esta cultura del cuidado está relacionada a buenas experiencias de vínculos familiares (aunque hay miradas pesimistas o que ponen en cuestión esto), del rol de lo femenino, del cuidado materno y también paterno, y de otras personas o expresiones culturales (experiencias religiosas, etc.) que nos «marcaron positivamente» en la vida. Ello debería ser trasladado de lo micro (esfera personal) a lo macro (esfera socio-económica-política) superando la dicotomía original planteada en los orígenes de la economía clásica (la no benevolencia de La Riqueza de la Naciones, de la simpatía, en la Teoría de los Sentimientos Morales, en Adam Smith). Sabemos que este traslado es difícil a medida que aumentamos las escalas humanas, donde aparece una mayor complejidad, la ley y los estímulos materiales y no materiales para orientar la acción humana. Pero es una «base» cultural existente y sólida donde deberíamos apoyarnos en esta nueva etapa de la humanidad, si queremos tener futuro. El riesgo de «no tener futuro» es claramente expresado por Steven Hawking, donde en una nota del diario El País dice -entre otras cosas- que: «creo que la supervivencia de la raza humana dependerá de su capacidad para encontrar nuevos hogares en otros lugares del universo, pues el riesgo de que un desastre destruya la Tierra es cada vez mayor».

Volviendo a una propuesta de vida esperanzadora en un mundo mejor podríamos concluir que la construcción de la cultura del cuidado conlleva la «cultura del compartir» y por lo tanto de compartir trabajo y el excedente que se genera. Todo ello través de nuevas formas de intercambio, de redistribución y donde la reciprocidad se vuelque en  experiencias de economía colaborativa, solidaria, de empresas sociales y demás experiencias similares (que incluyan el cambio tecnológico en esa dirección).

(1) Acerca de que se entiende por «capitalismo» es interesante el primer capítulo del libro «Historia del capitalismo», de Jürgen Kockca.

Una versión de esta nota también se ha reproducido en Facebook.