Hace un tiempo abordamos el enfoque de la economía regenerativa. Hoy nos referiremos al caso específico de la agricultura regenerativa, que está emparentada con la agroecología, la permacultura y otros enfoques y prácticas similares (incluida la siembra directa y el uso cada vez más eficiente del riego).
Este tipo de agricultura «es una aproximación de conservación y rehabilitación a los sistemas alimentarios y agrícolas. Se centra en la regeneración de la capa superior del suelo, aumentando la biodiversidad, mejorando el ciclo del agua, ampliando los servicios de ecosistema, aumentando la resiliencia al cambio climático, y fortaleciendo la salud y vitalidad de tierra agrícola. Las prácticas incluyen reciclar residuos agrícolas, como sea posible y añadir material comportado de fuentes fuera del predio».
En este artículo se hace una referencia comparativa entre Argentina y EEUU, en esta se da un caso muy exitoso (al que denominan «agricultura positiva») y en este artículo se comenta una experiencia muy valiosa en el norte patagónico.
Como señala esta nota debería ser el futuro de la agricultura, compatible con la reversión del cambio climático contribuyendo a un mundo mejor.