La aparición de la ley, o normas que rigen la vida social, económica y política, han sido un elemento fundamental para lograr la convivencia y la resolución de los conflictos de manera pacífica, en tanto haya órganos, mediaciones o prácticas político-institucionales que las hagan cumplir.
Hay enfoques filosóficos y religiosos que plantean «ir más allá» de la ley (por ejemplo a través de una «empatía compasiva»), así como líderes -como es el caso del Mahatma Gandhi (ver imagen de la entrada)- que han planteado una serie de principios a tener en cuenta para no ir a un mundo peor (y que destruyen al ser humano), como los siguientes:
1) La Política Sin Principios,
2) El Placer Sin Compromiso,
3) La Riqueza Sin Trabajo,
4) La Sabiduría Sin Carácter,
5) Los Negocios Sin Moral,
6) La Ciencia Sin Humanidad y
7) La Oración (y podríamos extenderlo al culto religioso) Sin Amor.
Si bien Gandhi fue muy resistido en el proceso de independencia de su país por grupos facciosos nacionalistas, políticos, étnicos y religiosos fanáticos (de hecho fue asesinado por estos motivos), y aún lo es en la India según esta nota, entendemos que es uno de los arquetipos a seguir así como las enseñanzas que venimos de mencionar. No es fácil, pero entendemos que son fundamentales para ir hacia un mundo mejor.
PD: Agradezco a Jorge Rodriguez Aparicio la referencia de este texto de Gandhi.