Longevidad y actividad mental

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Sin lugar a dudas la relación positiva entre longevidad y actividad mental está relacionada con el ambiente en el que nos hemos desarrollado, y si hemos vivido una vida sana vinculada con un entorno de afectos (ya desde la gestación y la infancia), alimentación equilibrada, actividad física, mental (en especial relacionada con una buena educación) y espiritual armoniosa. Del mismo modo si hemos podido cicatrizar o superar traumas o situaciones muy conflictivas, y no hemos desarrollado enfermedades degenerativas.

El tema de no considerar a la vejez como un factor de exclusión social ha sido desarrollado en este blog por Julieta Oddone en esta excelente nota. Hoy queremos difundir una información, cuya fuente es el New England Journal of Medicine, que expresa lo siguiente: «El director de la Facultad de Medicina de la Universidad George Washington sostiene que el cerebro de una persona mayor es mucho más plástico de lo que comúnmente se cree. A esta edad, la interacción de los hemisferios derecho e izquierdo del cerebro se vuelve armoniosa, lo que amplía nuestras posibilidades creativas. Es por eso que entre las personas mayores de 60 años se pueden encontrar muchas personalidades que acaban de iniciar sus actividades creativas.

Por supuesto, el cerebro ya no es tan rápido como en la juventud. Sin embargo, gana en flexibilidad. Por eso, con la edad, es más probable que tomemos las decisiones correctas y estamos menos expuestos a las emociones negativas. El pico de la actividad intelectual humana ocurre alrededor de los 70 años, cuando el cerebro comienza a funcionar con toda su fuerza.

Con el tiempo, aumenta la cantidad de mielina en el cerebro, sustancia que facilita el paso rápido de señales entre neuronas. Debido a esto, las habilidades intelectuales se incrementan en un 300% en comparación con la media. Y el pico de producción activa de esta sustancia cae entre los 60 y 80 años de edad. También es interesante el hecho de que después de 60 años, una persona puede usar 2 hemisferios al mismo tiempo. Esto le permite resolver problemas mucho más complejos.

El profesor Monchi Uri de la Universidad de Montreal cree que el cerebro de una persona mayor elige el camino que consume menos energía, corta lo innecesario y deja solo las opciones correctas para resolver el problema. Se realizó un estudio en el que participaron diferentes grupos de edad. Los jóvenes se confundieron mucho al pasar las pruebas, mientras que los mayores de 60 años tomaron las decisiones correctas.

Ahora veamos las características del cerebro a la edad de 60 a 80 años. Son realmente color de rosa.

CARACTERÍSTICAS DEL CEREBRO DE UNA PERSONA MAYOR:

1. Las neuronas del cerebro no mueren, como dicen todos los que las rodean. Las conexiones entre ellos simplemente desaparecen si una persona no se dedica al trabajo mental.

2. La distracción y el olvido aparecen por sobreabundancia de información. Por lo tanto, no es necesario que concentre toda su vida en nimiedades innecesarias.

3. A partir de los 60 años, una persona, al tomar decisiones, no usa un hemisferio al mismo tiempo, como los jóvenes, sino ambos.

4. Conclusión: si una persona lleva un estilo de vida saludable, se mueve, tiene una actividad física factible y tiene plena actividad mental, las habilidades intelectuales NO disminuyen con la edad, solo CRECEN, alcanzando un pico a la edad de 80-90 años.

Así que no le tengas miedo a la vejez. Esfuércese por desarrollarse intelectualmente. ¡Aprenda nuevas manualidades, haga música, aprenda a tocar instrumentos musicales, pinte cuadros! ¡Baile! Interésate por la vida, conoce y comunícate con amigos, haz planes para el futuro, viaja lo mejor que puedas. No olvides ir a tiendas, cafés, conciertos. No te encierres solo, es destructivo para cualquier persona. Viva con el pensamiento: ¡todas las cosas buenas todavía están por delante de mí!

Información:  Un gran estudio en los Estados Unidos encontró que:

▪ La edad más productiva de una persona es de 60 a 70 años;
▪ La 2da etapa humana más productiva es la edad de 70 a 80 años;
▪ 3ª etapa más productiva – 50 y 60 años.
▪ Antes de eso, la persona aún no ha alcanzado su punto máximo.
▪La edad media de los premios Nobel es de 62 años;
▪La edad promedio de los presidentes de las 100 empresas más grandes del mundo es de 63 años;
▪ La edad promedio de los pastores en las 100 iglesias más grandes de los Estados Unidos es de 71 años;
▪La edad promedio de los papás es de 76 años.
▪ Esto confirma que los mejores y más productivos años de una persona son entre los 60 y los 80 años.
▪Este estudio fue publicado por un equipo de médicos y psicólogos en el NEW ENGLAND JOURNAL OF MEDICINE. Descubrieron que a los 60 años alcanzas la cima de tu potencial emocional y mental, y esto continúa hasta los 80. Por tanto, si tienes 60, 70 u 80 años, estás en el mejor nivel de tu vida.»

A lo anterior podríamos agregar el caso de personas que viven hasta cerca de los 100 años o más y siguen siendo muy lúcidas. Entre muchas, tal es el caso de esta persona, así como de Edgar Morin. Sobre este último lo destaca en esta nota Fabián Bosoer. Allí se expresa que «el sociólogo francés Edgar Morin, gran pensador de la complejidad, fue un sobreviviente desde que nació, en plena pandemia de la llamada “gripe española”, en la mañana del 8 de julio de 1921.

“Soy hijo de todas las crisis que mis 99 años han vivido”, dice en su breve y sustancioso libro de memorias (Cambiemos de vía. Lecciones de la pandemia, 2020). Atravesó el siglo XX y al llegar casi a su centenario publica otro libro -Lecciones de un siglo de vida- y cuenta de qué manera nos toca vivir esta otra pandemia que asola a la humanidad…

El futuro puede presentarse tan apocalíptico como esperanzador. Y esa esperanza, radica, según él, en un cambio de paradigma que implique una regeneración de la política, una protección del planeta y una humanización de la sociedad. La propuesta de Morin es “una política de la humanidad” que recoja lo mejor de la civilización occidental – la tradición humanista, el pensamiento crítico y autocrítico, los principios democráticos, los derechos del hombre y de la mujer- y las aportaciones extremadamente ricas de las otras civilizaciones: una relación más consciente con la naturaleza, un sentido de la inclusión en el cosmos, unos lazos sociales comunitarios y una atención a la sabiduría de los mayores, que estas no deben perder al incorporar lo mejor de Occidente.»

Sin duda lo anterior nos puede llevar a un mundo mejor.

PD: Agradezco a Luis C. Faigón la referencia de la fuente del New England Journal of Medicine.

 

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