Procesos productivos que requieren cada vez menos trabajo directo

La imagen de la entrada, ha sido tomada como un «chiste» del libro «Vivir en tiempos turbulentos«, donde se le realiza un reportaje imperdible a Zygmunt Bauman. Sin embargo es algo que ya ha comenzado a suceder desde hace un tiempo -no sólo en las fábricas sino en muchos otros procesos productivos (1)- y se está acelerando.

El impacto de la inteligencia artificial en el mundo del trabajo tiene dos facetas: A) como «complementaria» al trabajo humano (también llamados «cobots«) en múltiples campos como las ciencias de la vida, y B) sustitutiva del trabajo humano.

Es un gran desafío para discernir cuál será nuestro futuro lugar como humanos (2), qué haremos sin lo que llamamos «trabajo» y cómo resolveremos nuestro sustento (3). De ello dependerá de que vayamos a un mundo mejor o a un mundo peor.

(1) Se está dando también en la programación de software.

(2) Una posibilidad que plantea la iniciativa de E. Musk con Neuralink, es que haya una articulación virtuosa entre el cerebro humano y la inteligencia artificial, donde esta última nos libere de daños cerebrales y nos potencie como humanos (está vinculado a la temática del «transhumanismo«).Claro quedará la cuestión de «la sabiduría» en el obrar.

(3) ¿Será como «prosumidores» y/o con un «ingreso básico universal»?