La importancia de no caer en la «mala política»
La frase del Martín Fierro, de José Hernández (que se muestra en la imagen de la entrada) se puede aplicar a muchos órdenes de la vida, y una de ellas es -sin duda- a los enfoques y prácticas de la política.
Si la política es una «ciencia», como se deriva desde Maquiavelo hasta la actualidad, y ella estudia la forma o el arte de acceder y permanecer en el poder, no caben enfoques «valorativos» (1) como el expresado en la obra Martín Fierro. Ahora bien, para quienes coincidimos en que la política es un servicio y una actividad noble, entonces sí puede haber buena o mala política.
Para sintetizar «lo malo» se podría afirmar que ello se produce cuando va asociada a la corrupción para acceder y mantenerse en el poder, cuando se lo realiza de manera no democrática o se cae en formas autocráticas (esto último está asociado al concepto de «hegemonía»), cuando se cae en el faccionalismo (2), cuando se mezclan los negocios privados con los asuntos públicos, cuando se cae en la simplificación de los problemas y no se atienden de manera seria y profesional las múltiples dimensiones y efectos de los fenómenos a encarar, cuando se hace con enfoques y prácticas adolescentes que terminan en «bravuconadas» con serios impactos negativos para el bien común, cuando no se registran los impactos de los cambios científico-tecnológicos y ambientales, las relaciones de fuerza en el mundo….entre otros.
La ética, un espíritu democrático y respetuoso de las minorías, junto con un abordaje serio y responsable de la complejidad de los problemas, serán condiciones necesarias para una buena política (3) que nos conduzcan a un mundo mejor.
(1) En todo caso se puede afirmar que conlleva una «ética de los fines» pero no de «los medios» o de su relación con estos últimos. Cabe destacar que, contemporáneamente a Maquiavelo, vivió Ignacio de Loyola que expresó un modo de liderazgo muy diferente (agradezco a José M. Diaz Bonilla el comentario).
(2) Este item y el anterior es abordado por Natalio Botana en esta reflexión.
(3) Será relevante que esta temática esté presente en la formación en general, y en particular en la universitaria y en los centros de formación de líderes políticos para que tenga impacto en especial en un futuro mejor.